La lluvia es
un fenómeno atmosférico de tipo acuático que inicia con la condensación de del
vapor de agua contenido en las nubes. Según la definición oficial de la Organización
Meteorológica Mundial la lluvia es la precipitación de partículas liquidas de
agua, de diámetro mayor de 0.5 mm o de gotas menores, pero muy dispersas. Si no
alcanza la superficie terrestre, no sería lluvia sino virga y si el diámetro es
menor seria llovizna. La lluvia se mide en milímetros al año, menos de 200 son
pocos, entre 200 y 500 son escasos, entre 500 y 10000 son normales, entre 1000
y 2000 son abundantes y más de 2000 son muchas.
Pero antes que
todo necesitamos nubes. Los nombres oficiales de los diferentes tipos de nubes
se dan en latín. Existen cuatro categorías fundamentales: Cúmulus o nubes de desarrollo
vertical. Stratus o nubes estratificadas, Nimbus nubes capaces de formar precipitaciones y
Cirrus o nubes de cristales de hielo.
La lluvia
depende de tres factores: la presión atmosférica, la temperatura y especialmente
la humedad atmosférica.
El agua puede
volver a la tierra, además, en forma de nieve o de granizo. Dependiendo de la
superficie contra la que choque, el sonido que producirá será diferente.
Las gotas no
tienen forma de lágrima (redonda por abajo y puntiaguda por arriba), como se
suele pensar. Las gotas con casi esféricas, mientras que las mayores están
achatadas. Su tamaño oscila entre los 0.5 y los 6.35 mm, mientras que su
velocidad de caída varía entre los 8 y 32 km/h, dependiendo de su intensidad y
volumen.
Las
precipitaciones acuosas se pueden clasificar en:
Lluvia. Es un término
general para referirse a la mayoría de las precipitaciones acuosas. Su intensidad
puede ser de débil a moderada.
Llovizna:
lluvia muy débil en la que a menudo las gotas son muy finas e incluso pulverizadas
en el aire.
Chubasco: es
una lluvia de corta duración, generalmente de intensidad moderada a fuerte. Puede
estar acompañada de viento.
Tormenta eléctrica:
es una lluvia acompañada por actividad eléctrica y habitualmente por viento
moderado o fuerte, incluso con granizo.
Aguacero: es
una lluvia torrencial, generalmente de corta duración.
Mozón: lluvia muy
intensa y constante propia de determinadas zonas del planeta con clima
estacional muy húmedo, especialmente en el océano Indico y sur de Asia.
Rocío: no es propiamente
una lluvia, pero si una precipitación acuosa. Se forma en las noches frías y
despejadas, por condensación de la humedad del ambiente.
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