sábado, 21 de enero de 2012

De lo que me das o de lo que te quito


¿Por qué habrían de ser las cosas diferentes? ¿Qué demonio del tiempo quiso cambiar el paisaje que veo? No tenemos porque siquiera pensar que desde ahora las cosas podrían ser diferentes. No hay motivo para pensar en el verano cuando afuera está cayendo la nieve. Aún en un futuro incierto nunca dejemos de pensar en un futuro tal vez más incierto que el presente,  nunca dejamos de fantasear con un mundo  que a pesar de su lógica kantiana  puede ser una locura más grande que la de hoy, nunca fue suficiente para detener tus pasos.

Hoy te puede decir que no podrás faltarme en mi vida cuando todo falte y falle alrededor. Cuando se caiga el mundo en pedazos, solo tú quedaras en pie. Deja que pase un momento, deja que pase otro y otro más y veras que pasa todo y al final no pasa nada. Deja las maletas, destruye el bagaje que angustias que provoca el silencio que como en muchos momentos como este lo vuelvo hacer. Quedarme mudo ante el todo, mirando, solo mirando.

Tú me das esa fuerza que necesito para mantener los pies sobre esta tierra y dejar de pensar en la migración de los sentidos como opción a un escape prometido en la lectura de la misa dominical. Tú me mantienes atado al mundo que aborrezco por definición, el mundo donde a nadie nos preguntaron que si era lo que queríamos. Tú me das aquella esperanza que la cruz ya dejo de darme hace mucho tiempo. Tú me das la fe en la humanidad, creo por tus ojos que hay piedad y el humano no merece la aniquilación tan prometida con una Armagedón que vendrá y me terminara de destrozar la poca conciencia y la nula alma que creo que me queda.
Solamente deja que pase el momento, todo pasa y al final tendré la certeza que no pasa nada. No emprendamos un viaje como meros compañeros de camión donde al llegar el final cada quien no sabrá porque empezó la travesía. Odio un futuro tan incierto, el cual pensar que no podremos llegar tomados de la mano; esa no fue promesa.

Tú me das el aire que respiro, y aunque en cada exhalación se me va algo de la vida que me das. Momentos como este y mil más quedan en mi mente. Y no necesito llegar al final de la travesía para  entender todo lo que me das. Lo que no entiendo es lo que te quito con todas mis ideas locas de lo que mal entiendo cómo vida; esta vida que no la concibo con todas sus reglas, normas, reglamentos, mandamientos y todo lo demás que sigue atando mis decisiones absurdas.

Es fácil ver tus ojos verdes y saber que todo lo que quieres es ese futuro incierto para los dos. Es fácil saber que todo lo que quieres es lo que poco de vida que me queda para compartirla y cuidarme como en momentos como este. Es fácil saber que tu mano me ha sostenido estos casi tres años y aunque alguna vez flaqueo, con tu sonrisa me volviste a recordar que nos juramos caminar uno al lados del otro. Es fácil cuando no hay nada que ocultar ni nada por lo que avergonzarse.

Tú, me das amor. 

1 comentario:

  1. Mi amor! no lo pude evitar si derramé lagrimas, y quiero decirte que te amo demasiado y que mi vida a tu lado es un bello sendero que seguiremos recorriendo de la mano a pesar de cualquier adversidad! tu me das luz, esperanza y el ánimo diario para saber que vale la pena vivir la vida al máximo y el saberme amada es mi mayor regalo!!! Te adoro papasito mio!!!

    ResponderEliminar