De los héroes o no se me hace

Hoy por fin terminan las olimpiadas de Londres 2012, y aunque yo no sea el tipo más deportista; hace unos años hubiera utilizado el termino de “Sport Billy” pero tal personaje parece haber caído en el olvido y en la memoria de una generación; veo muy poco las competencias, realmente me las tengo que topar en la pantalla de la televisión y así es la única forma que le presto algo de atención a la justa olímpica.

Dándole el beneficio de la duda y suponiendo que ninguna Delegación hizo, sino trampa, si altero los resultados de sus seleccionados para ir de vacaciones a Londres, y que todos y cada uno de ellos por lo menos cumplió con los requisitos mínimas; que para un pobre mortal como y muchos más que están igual o peor que yo; la proeza en dar las marcas olímpicas ya es un triunfo que debe ser reconocido. De mi parte les daría, sino una medallas, por lo menos un diploma de participación, no tengo mucho dinero y son muchos.

A todos estos jóvenes les reconozco su esfuerzo y su dedicación, al igual que a sus familias, que solamente ellos saben por lo que tuvieron que pasar para que sus hijos tuvieran y lograran una oportunidad. Lo que no estoy de acuerdo en ningún momento es que los llamen “héroes”. Llamémosles de otra forma, tal vez campeones o medallistas u olimpiacos, no sé como sea, pero no estoy ni estaré de acuerdo en que los llamen héroes.

Todos los atletas de una forma u otra cargaron en sus espaldas, la responsabilidad y las ilusiones de sus países y el gran compromiso de representar a una nación, y por lo menos hacer un papel decoroso, para la mayoría por lo que vi no estaban obligados a ganar una medalla, ya con terminar o no caerse era suficiente.

Reconozco que muchos de estos jóvenes nos han dado una satisfacción momentánea que al final no va a servir de mucho. Satisfacción momentánea , la consigo comiendo, tomando una copa de vino, un café, masturbándome, teniendo sexo, saltando de un avión; pero al final no puedo comprar nada con ello, ni le va dar empleo ni seguridad a nadie.

Ahora si me voy a ver si quieren muy amargado o negativo o como me quieran decir, pero creo que en este momento en las calles de cualquier ciudad, pueblo o aldea existen los verdaderos héroes. Gente que no tiene poderes ni habilidades especiales. Un padre de familia que sale a la calle a conseguir de manera honrada comida para su familia, una madre que le sonríe a su hijo y lo cuida y lo amamanta con la esperanza que jamás sufra. Hay un policía honesto que cuida de sus vecinos, un bombero que no duerme por estar alerta a una contingencia, un soldado que vela por la seguridad de nuestra tierra o un marino que cuida de las costas, un medico que está salvando una vida.

Mientras que les demos el mote de “héroes” a los deportistas, que aunque el deporte es una parte esencial de la vida hay que decirlo, seguiremos dejando de ver lo importante que es la gente común, que con su esfuerzo y a pesar de todo, hace verdaderas proezas por vivir día tras día con dignidad.