sábado, 24 de septiembre de 2011

De la vejez o el tiempo no perdona.

El diablo sabe más por diablo que por viejo. Lejos de lo que reza el refrán original, la vejez nos es lo mejor que nos pueda pasar. La experiencia se tiene por vivencias, obvio que a lo largo del tiempo transcurrido este cumulo de sapiencia es mayor, pero solamente si se hizo algo por adquirirlo.

La senectud es horrible y salvo que otra cosa pase, todos vamos para allá, pero antes de que otra cosa pase, repasemos a algunos de los problemas que conlleva la longevidad.

Sistema circulatorio: de entrada muchas personas de la tercera edad tienen hipertensión, insuficiencia cardiaca, arritmia, arteriosclerosis, angina de pecho, enfermedades coronarias, taquicardia, varices, sabañones, claudicación intermitente. Santísima virgen María ¿Qué es esto?

Sistema digestivo: acidez, insuficiencia hepática, falta de saliva (por eso ya no pueden comer pinole), próstata (además de ya no tener función, tiene que dar problemas). Verbo encarnado, ten misericordia.

Metabolismo: insuficiencia renal, piedras en los riñones, menopausia, falta de deseo sexual, sequedad vaginal, irritación vaginal, infertilidad, obesidad, diabetes, hipotermia y además deshidratación. Sagrado de corazón de Jesús, apiádate de nosotros.

Locomoción: artrosis, dolor de espalda, osteoporosis, pérdida de masa muscular fracturas, caídas. Virgen de los Remedios, favorécenos.

Respiratorio: perdida de la elasticidad bronquial, menor fuerza espiratoria e inspiratoria, cansancio, neumonía, bronquitis, ronquidos, silbidos, apnea del sueño. Cristo de la Noas, haznos el milagro.

La piel: manchas, piel reseca, arrugas, flacidez, verrugas, moretones, rozaduras, arañazos, heridas, patas de gallo, caries, cáncer de piel. Aparte de viejos, feos. Torre de marfil, vigila por nosotros.

Uñas: frágiles, amarillentas y aparte gruesas. Arca de la Alianza, asístenos.

Cabello: caída, canas, vello facial. Corona de espinas, ayúdanos.

Sistema nervioso, Alzheimer, demencia, sordera, tapones oídos, degeneración macular, ceguera nocturna, presbicia, cataratas, moscas volantes, ojos cansados, ojos irritados, disminución de los sentidos. Cristo Redentado, cúbrenos con tu manto sagrado.

Lo único de bueno de llegar a viejo es la tarjeta del INAPAM (Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores) porque hacen descuento en camiones, medicinas, teatros y uno que otro lugar.

Y aún así los llaman los “Años Dorados”.

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